En Chile, el dato clave de 2025 no es solo el crecimiento: es el tiempo. Los usuarios navegan más, comparan más y afinan mejor lo que buscan.
Asimismo, el mercado chileno crece bajo un nivel de moderación inferior a otros mercados de países cercanos. Aquí solo el 35% de los anuncios son rechazados, lo que se traduce en un mayor cumplimiento de las normativas de la plataforma por parte de las personas anunciantes.
Datos 2025 del sector del trabajo sexual en Chile - Usuarios
Sin duda, Chile registra uno de los crecimientos más sólidos del año. El tráfico aumenta un +16,6% respecto a los seis primeros meses de 2024 y roza los 1,1 millones de usuarios mensuales. Unas cifras ligeramente superiores a las de Argentina.
Pero el dato diferencial está en el uso que se hace de la plataforma, pues el tiempo medio de búsqueda alcanza los 6 minutos y 22 segundos, situando a Chile entre los países con sesiones más largas de la región.
Y las ciudades con más tráfico coinciden también con los tiempos de búsqueda interna más elevada, señal de exploración pausada y decisiones meditadas.
¿Quiénes son los clientes del trabajo sexual?
El usuario chileno es mayoritariamente masculino, con casi el 86% de la demanda, y presenta una distribución de edad claramente orientada a perfiles adultos.
Concretamente, los tramos etarios de 45–54 y 55–64 años concentran una parte muy relevante del tráfico, lo que define un usuario experimentado, recurrente y con preferencias bien definidas.
En cuanto a intereses, lejos de los estereotipos extendidos en la sociedad, los usuarios combinan la búsqueda de atención sexual con actualidad política, deporte, tecnología y mundo del motor, mostrando un patrón digital muy común.
¿Qué activa la búsqueda de acompañantes en Chile?
Las preferencias más consultadas a la hora de encontrar escorts profesionales son “maduras”, por la experiencia que muestran estos perfiles, “mensajes eróticos” para prácticas como el sexting, y los perfiles trans, rompiendo muchos de los tabúes que actualmente persisten en torno a este género.
Por otro lado, el interés por diferentes nacionalidades es muy relevante, siendo liderado por la búsqueda de profesionales chilenas, venezolanas, bolivianas, colombianas y peruanas. Esta variedad refuerza un mercado multicultural y abierto a nuevos estándares de belleza.
Asimismo, en el uso de filtros para encontrar servicios, el coito sigue siendo el más solicitado, como es habitual. Pero también destacan el sexo oral, los masajes eróticos, el trato de novia y los tríos, confirmando una demanda orientada a la experiencia completa.
Datos 2025 del sector del trabajo sexual en Chile - Trabajadorxs sexuales
En el lado de la oferta chilena, esta está dominada por mujeres (84,4%), con una presencia significativa de perfiles trans (13,2%) y, en mucha menor medida, hombres (2,4%). Una realidad que se replica en otros países de Latinoamérica.
Sin embargo, el rasgo diferencial es la edad: más del 87 % de lxs trabajadorxs sexuales tiene menos de 35 años, con una fuerte concentración en el tramo de 18 a 24 años.
Las etiquetas más repetidas, como son “curvy”, “teen”, “independiente”, “de lujo” y “universitaria”, reafirman una oferta joven, estratégica y claramente orientada a nichos.
Las tres ciudades con mayor presencia de escorts en activo
Por otro lado, Santiago de Chile es el epicentro de la oferta de escorts profesionales en el país, pues concentra el 43,1% de los anuncios activos.
Muy por detrás aparecen Temuco y Viña del Mar, mostrando una fuerte centralización de la oferta en la capital.
- Santiago de Chile 43,11%
- Temuco 10,05%
- Viña del Mar 3,18%
Los servicios más anunciados: del presencial al digital
La oferta de servicios promocionados en esta plataforma es una de las más amplias del análisis anual, con un equilibrio claro entre servicios presenciales y prácticas especializadas o nuevas modalidades.
El oral, el trato de novia y el masaje erótico lideran el ranking, pero gana peso el componente experiencial como son las fantasías y disfraces, los besos y ciertos fetiches.
Aunque todavía minoritarios, los servicios eróticos digitales, como las videollamadas hot y la producción de vídeo y fotos personalizados y bajo demanda, refuerzan un modelo híbrido que amplía la monetización más allá del encuentro físico.
Una modalidad que es tendencia desde la pandemia y en la que muchxs trabajadorxs sexuales en Chile no solo han encontrado otra forma de aumentar sus ingresos, sino que también les ofrece mayor seguridad e integridad personal.